¿De qué hablamos cuando hablamos de justicia?

IIED ha enfatizado en su nuevo manifiesto su determinación para abordar las injusticias sociales, económicas y ambientales. Karen Wong-Perez explora la riqueza y el poder de la diversidad de tonos, texturas y voces que demandan justicia en los movimientos sociales contemporáneos. 

Karen Wong Pérez's picture
Insight by 
Karen Wong Pérez
Investigadora senior en el grupo de cambio climático de IIED
11 July 2024
Collection
Articulating the role of law for a just transition in 2023 and beyond
A series of insights that explores ways to navigate law, economies and justice in times of transition
Illustration of hands holding together the planet

La riqueza y el poder de la diversidad de tonos, texturas y voces por la justicia en los movimientos sociales contemporáneos (Foto: wildpixel, via iStock)

Y cada dolor y cada rabia toma un nombre, un rostro, una historia, un hueco que duele e indigna. El mundo y su historia se llenan así de ausencias, y esas ausencias se hacen murmullo, palabra fuerte, grito, alarido. Nuestro mensaje no es de consuelo ni de resignación. De rabia es nuestro mensaje, de coraje. Porque conocemos ese mismo dolor. Porque tenemos en las entrañas la misma rabia. Porque siendo diferentes, así nos parecemos.

Subcomandante Insurgente Galeano, EZLN, 2015

Diferentes conceptualizaciones de justicia e injusticia cuentan reclamos de justicia diferentes. Nombrarlos produce un sentido de acción y agencia. Mirando hacia atrás, vemos que los movimientos sociales han utilizado múltiples formas para describir las muchas formas de injusticia contra las que luchan, cuyas variadas luchas, dolores y rabias dan forma a múltiples nociones de justicia.

El poder desigual se expresa a través de la imposición de conceptos y marcos, y así destruye ambiciones y narrativas subalternas. Así es como la injusticia se perpetúa a través del olvido, la impunidad y la desmemoria.

Entonces, ¿por qué es importante nombrar diferentes nociones de justicia, todas por separado? Nombrar formas de justicia e injusticia no solo produce una sensación de acción y agencia, sino que también hace posible reclamar activamente el derecho a contar la propia historia, la historia subalterna, y de contrarrestar los marcos conceptuales dominantes, ampliando la visión de lo que es socialmente deseable. Todo esto no es abstracto: las narrativas, formas de pensar, y marcos conceptuales dan forma a políticas públicas con impactos tangibles.

Illustration of hands showing different signs, like peace and a fist. One hand is holding a sign with different definitions of justice.

La indivisibilidad de la justicia (Foto: Ilustración via Rawpixel, CC0 1.0, Jodie Frosdick, IIED)

Enfoques sobre la justicia 

Los seres humanos tenemos siglos tratando de entender qué es la justicia y cómo alcanzarla. Aquellos que siguen la tradición del contrato social preguntan: "¿Cómo se comportan las instituciones y los individuos en una sociedad justa? ¿Qué contrato social sería unánimemente aceptado por todos desde un punto de vista imparcial?". Y así, ponen su atención en identificar los arreglos ideales de una sociedad justa y los principios de justicia para guiar instituciones perfectamente justas.

Quienes siguen la tradición de la elección social comienzan su análisis viendo el mundo tal como es. Esto requiere comparaciones entre lo justo y lo injusto para identificar injusticias manifiestas. Se enfocan en nombrar, entender y eliminar estas injusticias. La injusticia es a menudo más tangible que la justicia, por lo que muchos movimientos sociales siguen esta tradición para entender la justicia. Algunos usan una combinación de ambas tradiciones. 

Nuestras diferentes comprensiones de la justicia afectan cómo abordamos los problemas de justicia. Diferentes nociones de justicia articulados por movimientos sociales reflejan los baluartes usados para la lucha contra múltiples manifestaciones de injusticia, por ejemplo: 

Justicia climática hace visible la desproporcionalidad en los impactos sociales, económicos, de salud e intergeneracionales tanto del cambio climático como de sus respuestas en individuos, grupos y países que han contribuido poco a esta crisis. Los defensores de la justicia climática resaltan la contribución histórica de los países industrializados y las corporaciones al cambio climático y cómo se han beneficiado de la extracción y uso de combustibles fósiles, vinculándolo con el colonialismo climático. Demandan reparaciones climáticas y una transición justa hacia un futuro con bajas emisiones de carbono. Destacan que abordar la crisis climática es una condición necesaria para otras justicias interseccionales. 

Justicia ambiental hace visible la distribución desigual tanto de beneficios como de peligros ambientales como la contaminación del aire, del agua y la mayor exposición a desechos tóxicos y peligrosos, que afectan desproporcionadamente a las comunidades marginadas y racializadas (también denominado racismo ambiental). Destaca la exclusión de ciertos grupos de la toma de decisiones sobre la gestión de recursos naturales y la falta de reconocimiento de diferentes formas de ser y saber (vinculado a la justicia como reconocimiento y la justicia epistémica). 

Justicia racial hace visible la discriminación, el prejuicio racial, la opresión estructural y las desventajas acumuladas que perjudican a las personas en función de su raza. Resalta las raíces y legados coloniales de la violencia racial. Involucra desmantelar estructuras de racismo interpersonal, institucional y sistémico para asegurar igualdad de oportunidades y el reconocimiento y reparación de daños (vinculado a la justicia restaurativa ). 

Justicia de género hace visible las desigualdades estructurales que perpetúan la discriminación, exclusión y violencia de género desde una perspectiva interseccional. Desafía el concepto binario de género y busca rectificar las desigualdades estructurales. No solo busca igualar condiciones y oportunidades, sino también rectificar las injusticias de género históricas y sistémicas.   

Justicia multiespecie/ecológica hace visible los agravios cometidos hacia otras especies a través de su abuso y comodificación. Busca el reconocimiento de los seres de la Tierra, como animales, plantas, bosques, ríos y sistemas ecológicos, como poseedores de derechos y dignos de vivir sus vidas de acuerdo a sus capacidades. Tomar en cuenta sus intereses implica obligaciones morales y políticas para las instituciones que componen la estructura básica de la sociedad

La indivisibilidad de la justicia 

Los movimientos sociales han articulado muchas más nociones de justicia, cada una haciendo visibles desafíos particulares. Angela Davis, prominente activista política feminista, filósofa y autora, citando a Martin Luther King Jr., habla de la indivisibilidad de la justicia, destacando que no podemos separar diferentes causas y luchas y que la justicia no puede compartimentarse. Trasciende fronteras y exige un compromiso colectivo.

Podríamos, así, imaginar la justicia como la luz emitida en el centro de un poliedro con muchas caras. Cada cara refleja la luz de una manera particular, y las personas posicionadas en diferentes puntos ven un tono diferente.

¿Cuál es la luz común en las múltiples definiciones de justicia? 

La autora Naomi Klein argumenta que, a pesar de su diversidad, diferentes reclamos de justicia tienen algo en común: la resistencia a un sistema de creencias que impone jerarquías de valor y vida. En este sistema, la supremacía, el control y la seguridad de unos pocos se mantienen a expensas de los muchos.  

El historiador y filósofo Thomas Kuhn señaló que una vez que un grupo de personas adquiere una forma de pensar, un marco conceptual, también adquiere un criterio para elegir los problemas que, según esa forma de pensar, pueden tener soluciones. Así, los problemas percibidos desde nociones dominantes son los únicos problemas que una comunidad admitirá. 

¿Qué logran las diferentes nociones de justicia? 

Un concepto de justicia nombra una lucha. Hace visibles las particularidades de múltiples manifestaciones de injusticia y produce un sentido de agencia desde el cual las narrativas subalternas se alzan como una bandera para encontrar un terreno común y fortalecer los movimientos sociales. También ayuda a instalar nuevos paradigmas y nuevos marcos conceptuales para hacer visibles problemas específicos, ofreciendo herramientas para entenderlos y medirlos, y para diseñar estrategias para resolverlos. 

Las nociones plurales de justicia que emergen de movimientos sociales e iniciativas de base informarán el trabajo de IIED en 2024 y más allá, mientras implementamos nuestro recién publicado 'Manifiesto para un mundo próspero' (en Inglés) y trabajamos con otros para promover economías más justas y sostenibles.